Se oye el cantar

Se oye el cantar de un pajarillo.
Y se oye el eco de un ventarrón.
Pero no oigo por más que quiera.
Dulces latidos de tu corazón.

A veces pienso que ya no vives.
Y en otras pienso que te perdí.
Si yo pudiera calmar tu angustia.
Yo solo quiero estar en ti.

Cuando despierto en la mañana.
Por la ventana oigo el cantar.
De muchas aves que felizmente.
A un nuevo día van alabar.

Solo te pido que te despiertes.
De ese letargo sumido en ti.
Y oigas el canto de hermosas aves.
Que en tu ventana cantan por ti.

Se oye el cantar de un pajarillo.
Y se oye el eco de un ventarrón.
Pero no oigo por más que quiera.
Dulces latidos de tu corazón.